Texas.- El pasado 10 de septiembre una pareja fue invitada por amigos a cenar y en el lugar, el dueño del restaurante decidió correrlos, luego de que estos se negaran a retirarse los cubrebocas.
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Después de medidas estrictas para protegerse de la pandemia covid-19, Natalie Wester y José López Guerrero acudieron a un sitio ubicado en la región de Rowlett para pasar un momento agradable, pero desafortunadamente lo que se llevaron fue una mala experiencia.
Al llegar al lugar, se acercó a la mesa una mesera quien les dijo que debían quitarse las mascarillas
“Es parte del código de vestimenta del establecimiento la prohibición de las mascarillas” mencionó.
Respecto a lo acontecido, la pareja explicó que el uso de cubrebocas es para proteger a su pequeño bebé recién nacido que padece una enfermedad pulmonar llamada fibrosis quística.
Sin embargo, la mesera del Hang Time Sports Grill & Bar; establecimiento que no cuenta con algún letrero que señale la prohibición, les reitero que el dueño es antimascarillas y no le agradaba la idea de que se usaran dentro de su negocio.
“Gaste mi dinero en este negocio, puse mi sangre, sudor y lágrimas en este negocio y no quiero mascarillas aquí” fueron las palabras del propietario.
Ante la desagradable situación, el matrimonio señaló que no volverán a salir por el bien de su hijo y que no pretenden iniciar acciones legales.
