España.- Sabemos que la tecnología ha multiplicado los canales de comunicación con los que las empresas pueden trasladar sus mensajes y ante ello son las redes sociales las que mantienen gran peso sobre dicha área.
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No obstante, también se tiene que ser consciente tanto con lo que se dice como con lo que se hace, debido a que en estos tiempos se ha estado pasando por incertidumbre, pero económica.
Sin duda alguna, las redes sociales y páginas webs son un arma de doble filo y España lo ha demostrado, puesto a que recientemente ha lanzado una alerta sobre la nueva modalidad de estafa con el método de la popular serie, “El Juego del Calamar”.
Así es, las estrategias de los estafadores han sido mediante los conocidos navegadores de accesibilidad, página web; las víctimas son conducidas a una dirección de internet denominada “sitio infeccioso” para de ahí sustraer tanto sus datos personales como los bancarios.
De acuerdo con información de autoridades, el engaño se efectúa cuando estos implementan las tarjetas de invitación que aprecian durante los primeros capítulos de la serie surcoreana.
En la producción terrorífica cada uno de los participantes recibe una tarjeta de cartón en la que están dibujados tres figuras, un círculo, un cuadrado y un triángulo, las cuales representan las formas usadas para jugar al “juego del calamar” .
En la tarjeta se encuentra un número de teléfono al cual llaman los concursantes para saber el día y la hora en la que serán recogidos y en el que expresan su voluntad de participar en el juego.
Ante las ideas que ha generado esta serie, se suma una más, los estafadores han imitado esta tarjeta, colocando en la parte de atrás un código QR el cual lleva a la mencionada página, pretendiendo así robar datos, dinero e información vital de las personas que en la vida real sigan la instrucciones.
Es por ello, que la Policía Nacional ha lanzado una alerta mediante redes sociales en la que muestran las tarjetas usadas por los delincuentes para aprovecharse de la devoción de los fanáticos y de un truco publicitario.
“Desconfía si ves un código QR en un lugar público, si escaneamos un código y no sabemos si es de confianza puede llevarnos a sitios infecciosos y poner en peligro nuestros dispositivos”, notifica la Policía.
