México.-
Una puesta en escena que parece una mezcla de un sueño -tipo pesadilla-, mezclado con los efectos de algún psicotrópico es Alicia subterránea. Una obra teatral que tiene un tono gótico y oscuro, que trata sobre las vivencias del escritor Lewis Carroll;
quien resalta su particular amor por las niñas. Algunos piensan que el
autor ensalzaba sus valores, además de que apreciaba su gran inocencia;
otros críticos más siniestros suponen que el autor tenía un gusto oculto
por la paidofilia.
El primer cuento de Carroll lleva el mismo nombre y de ahí parte la
historia que incluye pasajes de Alicia en el país de las maravillas y
Alicia en el espejo”.
Francesca Guillén interpreta a Alicia. “Mi problema es
que no dejo de parecer niña, he jugado siempre con eso. Ahora soy una
mujer que entiende muy bien este papel que necesita una mezcla de
inocencia con malicia. Es muy demandante físicamente pero me divierto
como enana, me canso muchísimo, pero estoy en la edad y el momento
preciso para hacer a esta Alicia. Para mi los niños son los seres más
brillantes de la tierra, los más puros y los más coherentes, por eso mi
niña tiene una capacidad analítica profunda”, puntualizó.
El histrión Javier Díaz Dueñas realiza cinco roles
distintos, y lo hace tan magistralmente que un Lewis Carroll se
diferencia perfectamente del Conejo o de los otros. Se integró un
personaje medio olvidado que es el Avispa, que significa simbólicamente
un Carroll viejo y decrépito, asimismo la Oruga que es muy simpática y
un poco pesada, y al Sombrerero Loco que es precisamente eso, un
demente.
“Es una experiencia totalmente nueva actuar este amor sublime, entre esa
Alicia que realmente existió y que está dejando de ser niña, es una
chiquilla que Lewis Carroll no desea que crezca, porque la ama
intensamente. Los cinco personajes que interpreto me dan la oportunidad
de jugar, siempre me divierte hacer el teatro del absurdo”, señala
Javier Díaz Dueñas quien añade.
“Esta obra no está dirigida a los niños porque lo que vemos en escena es
una pesadilla. Sólo los invito a reflexionar y pensar que la vida aquí
es un absurdo realmente, un sin sentido, y representarlo para mi es un
divertimento, relata”.
Leonardo Mackey personifica a El Ratón, El Fantasma, al
Gato de Chester, a la Liebre de marzo y a la Reina de Corazones. Esta
viene a ser su primera producción ejecutiva dentro de este teatro tipo
gótico, con situaciones extravagantes, que se entienden perfectamente y
que contiene personajes de un mal sueño, así como lo dice su eslógan:
“Érase una vez en el país de las pesadillas” o como El Conejo también
señala: “Aunque la poesía no tenga sentido, el mensaje tiene
significado”.
Alicia Subterránea se presenta en el teatro Telón de Asfalto ubicado en
Perpetua No.- 4, casi esquina Insurgentes. Los viernes, a las 20:30
horas; sábados, a las 18 y 20:30, y los domingos, a las 17 y 19 horas.
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