OV7, los Timbiriche de los noventa

?México, DF.- Remontándome a 1989, a un día domingo muy común,
en donde esperábamos que dieran las seis de la tarde para prender
nuestro televisor y ponernos al tanto de lo que el señor Raúl Velasco
nos preparaba, Julissa presentaba a la Onda Vaselina, unos pequeños que
con su ángel y talento entonaban canciones de los 60 y 70.
Con la canción ?Qué triste es el primer adiós?, los pequeños se
hacían de seguidores que tomaban sus canciones para amenizar las fiestas
de cumpleaños.
Para muchos que ya estamos por los 30 años, fue una agrupación que
nos marcó como generación, y de la cual posiblemente tuvimos varios de
sus cassettes.
De ahí en adelante conocimos varias de sus producciones, quién no
recuerda ?Susanita tiene un ratón? o ?Pónganse botas y quítense los
tenis?, en versión banda, donde el pequeño Kalimba hacía de las suyas.
En Torreón, muy pequeños visitaron el Auditorio Municipal, fue de las
pocas veces que lo ví a reventar y la Plaza de Toros también fue su
escenario, al igual que la Feria de Torreón, y el Palenque Vicente
Fernández en la de Gómez Palacio.
En su regreso, siguen las especulaciones de que sin Kalimba el grupo
no funcionaría, al igual que pasó con los cuarentones Garibaldi, sin
embargo, OV7 ya tiene disco de oro en preventa y a su sencillo le va muy
bien en las estaciones de radio nacional, as fechas de sus
presentaciones están listas y muchos queremos un lugar para verlos antes
que nadie.
OV7 es para los noventa lo equivalente a Timbiriche para la
generación de los ochenta y aunque comenten que regresaron por no tener
proyectos individuales, para mí es un gran acierto que les dará sin duda
su tercer aire.
Lolita Cortés se refirió a ellos como un grupo de gente talentosa,
apasionada y que se rompe el alma en el escenario y, sin duda, era lo
que se percibía cuando ellos aparecían para deleitarnos con sus éxitos.