Ciudad de México.- La actriz Lindsay Lohan se niega a tomar un
tratamiento de rehabilitación como parte de un acuerdo por los tres
cargos que enfrenta actualmente.
De acuerdo con perezhilton.com, la joven de 26 años insiste en que es inocente y no teme ir a prisión.
El fiscal que lleva el caso estaba dispuesto a aceptar el arreglo para
terminar con el caso. Para que Lohan no pisara prisión tendría que pasar
6 meses encerrada en rehabilitación, pero la actriz no aceptó pues
insiste en que no hizo nada malo.
Lohan tiene una cita con la justicia de Estados Unidos a finales de este mes para responder por los cargos de mentirle a la policía, de manejar imprudentemente y de dificultarle a la policía la realización de sus labores.
El proceso viene de un percance automovilístico a mediados del año
pasado, cuando su Porsche chocó contra un camión en Santa Mónica.
La actriz, quien se encuentra en libertad condicional por otro proceso
relacionado con el robo de un collar, podría ser condenada hasta a 245
días de cárcel si la jueza Jane Godfrey considera que violó los términos
de dicha libertad condicional.
Parece, sin embargo, que Lindsay no está preocupada por un posible regreso a prisión.
El lunes pasado, la abogada de Lohan, Shawn Holley, se dirigía a la
corte para negociar el acuerdo, pero poco antes se enteró de que Lindsay
había prescindido de sus servicios y contratado a otro abogado de
dudosa reputación y que no tiene permiso para ejercer en California
(donde se realiza el proceso).
La fiscalía aún sostiene la oferta pero la que no desea aceptar es Lohan.CHG