?México, DF.- No se puede tapar el sol con un dedo. Menos si ese sol es capaz de
vender 10 mil boletos en tres horas para un concierto en Argentina o si 5
mil fanáticos chilenos se muestran dispuestos (y hasta desesperados) a
gastar 480 dólares por verlo de cerca.
Luis Miguel, queda claro, se oculta cuando quiere y de igual manera
ilumina con su brillo a sus seguidores en el momento adecuado. Luego de
15 meses de vida anónima, El Sol salió de nuevo para dar una conferencia
de prensa (curiosamente de noche) en Las Vegas. Las instrucciones a los
reporteros de la fuente fueron precisas: no se permitió tomar
fotografías ocasionales, sólo se repartieron las imágenes oficiales
autorizadas por la disquera.
La última que apareció oficialmente fue en mayo de 2009 cuando cerró la
gira ?Cómplices? en Venezuela, luego de haber dado conciertos durante
año y medio por México, EU, Sudamérica y España.
Las ganancias fueron contabilizadas por la agencia Pollstar, que lo
ubicó como el latino más generador del año 2009: vendió boletos por 18
millones y medio de dólares. Estuvo arriba, por ejemplo de The Killers,
la banda de rock sensación.
Ahora que ha vuelto a salir, El Sol muestra el mismo brillo. Ayer se
pusieron a la venta los boletos para su concierto en el estadio de
Vélez, Argentina, y ayer se agotaron: 10 mil boletos en apenas tres
horas.
Y en Chile hoy puede presumir que sus entradas son las más caras de la
historia de aquel país. Superó por cinco dólares a Madonna, quien en
2008 tuvo boletos en 475 dólares. Los de Luis Miguel costaron 480 y se
agotaron los 5 mil que se pusieron a la venta ayer mismo.
Pero la gira con el nuevo disco (titulado simplemente Luis Miguel)
comienza en Las Vegas con cuatro presentaciones en el teatro del
Caesar?s Palace.
El foro tiene capacidad para 4 mil 100 personas y los boletos varían
entre 95 y 250 dólares. Los cálculos más conservadores llevan a la suma
de millón y medio de dólares generados en estas tres noches.
Además, es el latino con más discos colocados en preventa en iTunes.
La página oficial del cantante publicó un comunicado en el que informa:
?El primer sencillo ?Labios de miel? alcanzó la posición número uno en
la lista de radio nacional en México, según confirma la consultora
Nielsen BDS. Asimismo, a minutos de salir a la venta, el tema ya ocupa
el primer lugar en las tiendas de música digital más importantes del
país?.
En su lista de récords hay varios primeros lugares: primer latino en
recibir un disco de oro en EU por un álbum en español; primer latino en
llenar el Madison Square Garden, primer artista en realizar 30
conciertos sucesivos en el Auditorio Nacional. Y en su vitrina tiene 10
premios Grammy (cuatro de la Academia estadounidense y seis Latinos).
¿Venta de discos? Más de 60 millones de copias en todo el mundo a lo
largo de 28 años de carrera.
¿Dónde estaba?
Luis Miguel ha permanecido oculto desde que terminara su gira
?Cómplices? el 26 de mayo. Durante medio año, las únicas noticias sobre
su vida fueron publicadas a través de la revista Hola.
Así como durante los años 2007 y 2008, esta publicación española ofreció
a sus lectores en exclusiva el nacimiento de los dos hijos de Luis
Miguel con Aracely Arambula; durante 2009 dio cuenta del rompimiento de
esta pareja y los rumores de que el cantante tuvo un tórrido romance con
Genoveva Casanova.
El año 2010, sin embargo, comenzó con la noticia de que había regresado con su antigua novia Daisy Fuentes.
Con ella sería visto por última vez el 7 de febrero en un restaurante de
comida griega. El encuentro fue comprobado con unas fotos de paparazzi
borrosas y poco ilustrativas: se ve a Luis Miguel de espaldas y a Daisy
muy lejos.
Después de esa aparición El Sol desapareció. Se supo que ingresó al
hospital Cedar?s Sinai de la ciudad de Los Ángeles a mediados de abril.
Se dijo que ingresó por un infección estomacal, luego que se había hecho
una cirugía estética, que una bactería invadió su sistema nervioso y,
finalmente, que había muerto sin que nadie lo supiera.
Sin embargo, ayer El Sol salió de nuevo. No lo pudieron tapar ni los
rumores ni las críticas de quienes aseguraban que su hospitalización fue
un truco publicitario.
