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Culiacán, Sin.- Las deudas suelen ser una de las principales causas por las que los usuarios de los servicios financieros no pueden dormir, y, en ocasiones los préstamos y sus intereses se convierten en un verdadero dolor de cabeza para quienes los pidieron para salir de un “apuro” o simplemente comprar algo importante.
Una de las principales dudas entre los clientes de los bancos, a quienes les resulta complicado sortear con la presión de los despachos de cobranza, los cuales tienen la única tarea de recuperar el dinero, es si el no poder cubrir el pago puede llevarlos a la cárcel.
Y es que la insistencia de quienes están a cargo de los cobros suele ser tanta que, genera un estrés muy grande en los deudores, si este es tu caso, sigue leyendo.
¡Relájate! pues debes saber que el proceso no es tan fácil, ni se puede llevar a cabo así de la nada; aun cuando te retrases en el pago y alegues con los cobradores, no puedes terminar tras las rejas, y no llegará más allá de verse afectado tu historial crediticio, con la posibilidad de caer en el buró de crédito.
De acuerdo a la Condusef, los deudores que van a prisión son aquellos contra quien les fue emitida una orden en especifico, la cual establece un arraigo domiciliario.
Es el juez quien debe seguir este proceso, y, en caso de que la persona se oculte o se ausente, es ahí cuando se lanza una orden de aprehensión.
Según el sitio especializado en temas financieros, Mi Bolsillo, en México no van a prisión quienes deben en su tarjeta de crédito o solicitaron un préstamo, por lo que, esta posibilidad resulta realmente remota.
También, se establece que, quienes hacen un fraude, solicitando una deuda mayor al medio millón de pesos, sabiendo que no pueden pagar, actuando con dolo, son quienes sí son encarcelados.