Ciudad de México.- ¡Como han pasado los años! El 15 de febrero de 2004 un jovencito llamado Francisco Guillermo Ochoa haría su debut como jugador profesional con las Águilas del América.
Ochoa arrancaría una carrera legendaria al debutar ante los Rayados de Monterrey.
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“Paco Memo” ocupaba el lugar del experimentado portero Adolfo Ríos, el cual se encontraba recuperándose de una operación.
Fue el técnico holandés Leo Beenhakker, quien convocó a “Paco Memo” luego de haberle observado en un partido entre las fuerzas básicas y se percató de las habilidades de Ochoa, por lo cual lo ascendió al primer equipo.
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De ahí en adelante, Ochoa se convertiría en uno de los mejores porteros de México y en el Torneo Clausura 2005 pudo proclamarse campeón con el equipo de sus amores.
