Mazatlán, Sin.- La boxeadora mazatleca Tamara Cruz no pierde la esperanza de seguir participando en los mejores eventos de esta disciplina, luego de tener una frustrante eliminación en los Juegos Centroamericanos y del Caribe 2023.
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“Fue muy frustrante porque fueron mis segundos Juegos Centroamericanos, me sentía muy preparada, muy fuerte cuando me fui de aquí. Lamentablemente cambiaron las circunstancias, pero la meta es París 2024, calificar a Panamericanos y ganar medalla”, expresó.
Para el gremio boxístico que estuvo presente durante su participación, aseguraba que era la final adelantada entre Cruz y la boricua Stephanie Piñeiro en la división de los 66 kilogramos.
“Sí me duele porque me levanto entrenando muy fuerte, pero tengo que seguir levantándome hasta llegar a donde yo quiero”, añadió.
La esperanza muere al último para la pugilista al buscar en el mes de agosto su pase a los Juegos Panamericanos 2023, al ser convocada a la Copa Intercontinental que se celebrará en Colombia.
“Próximamente tenemos competencia en Colombia y buscar mi pase a Juegos Panamericanos”, agregó.
Con el cobijo de su entrenador porteño Radamés Hernández, Tamara Cruz siente que representa un sólido respaldo para encarar su próximo compromiso que le ayude a tener mayor seguridad sobre el cuadrilátero.
“Como en cada pelea se gana, se pierde y se aprende, buscando hacer mejoras para no cometer los mismos errores. Gracias a Dios vengo a entrenador con el profesor Radamés Hernández, creo que me hizo mucha falta. Sentir la confianza de estar trabajando con él, me da la seguridad de a hacer mejores peleas”, dijo.
