?Nueva York, EU.- Todavía es demasiado temprano para proclamar a un equipo de la NFL como
una especie de campeón. Pero este fin de semana podrá ir dando una
muestra sobre cuáles tendrán la manija en ambas conferencias.
Los Packers y los Bears se miden en un duelo de invictos en Chicago la
noche del lunes, un día después que los Vikings y Lions, equipos sin
victorias en dos partidos, se cruzan en Minnesota.
También, los punteros Dolphins se topan con los Jets horas después que
los Patriots y Bills jueguen en Nueva Inglaterra el domingo.
La tercera fecha de la temporada tiene varios partidos de alto calibre.
“Nunca es muy temprano para hablar de esas cosas”, dijo el quarterback
de los Jets Mark Sánchez. “Necesitamos afrontar este partido como
siempre, entendiendo su importancia, pero al mismo tiempo no dejarnos
llevar por la discusión”.
También el domingo, Atlanta visita a Nueva Orleáns; Dallas en Houston;
Pittsburgh en Tampa Bay; Indianápolis en Denver; Tenesí en los Giants de
Nueva York; Filadelfia en Jacksonville; San Diego en Seattle; Oakland
en Arizona; Cleveland en Baltimore; Cincinnati en Carolina; San
Francisco en Kansas City; y Washington en San Luis.
Green Bay (2-0) en Chicago (2-0)
La rivalidad más añeja de la liga. Green Bay luce en gran forma, pese a
un mermado ataque por tierra. La victoria de Chicago en Dallas ha
disparado el entusiasmo en la Ciudad de los Vientos. El triunfador
pasará al frente del Norte de la Conferencia Nacional luego del mal
inicio de Minnesota.
Jets (1-1) en Miami (2-0)
Otro partido con tintes de batalla campal para los Jets. Primero fueron
los Ravens y luego los Patriots. Aunque nadie en el bando de los Jets ha
dicho que odia a los Dolphins, la rivalidad Miami-Nueva York está entre
las más intensas de la liga.
Miami necesita producir más con su juego aéreo, renglón en el que
aparece en el puesto 28 de la liga. Esto porque los Jets tienen una
magnífica defensa contra el juego terrestre. El wide receiver de los
Dolphins, Brandon Marshall, no tendrá que preocuparse con el cornerback
Darrelle Revis, baja por una lesión muscular.
Buffalo (0-2) en Nueva Inglaterra (1-1)
Los Bills ya no saben que hacer para ganarle a los Patriots. En la
apertura de la campaña de 2009, Buffalo dejó ir la ventaja en los
minutos finales y perdió. La paternidad de los Patriots se refleja en 13
victorias en fila. El panorama no pinta favorable ahora con la decisión
de cambiar de quarterback en Buffalo, Ryan Fitzpatrick por Trent
Edwards.
Atlanta (1-1) en Nueva Orleáns (2-0)
Otro partido importante en cuanto al rumbo de una división. La defensa
de Atlanta, décima contra el pase y con apenas 22 puntos recibidos,
necesita pararse firme ante Drew Brees y sus prolíficos receptores. Pese
a la ausencia del running back Reggie Bush (pie fracturado) , los
Saints no dejan de ser formidables.
Dallas (0-2) en Houston (2-0)
El clásico de Texas le ofrece a los de Houston la oportunidad de opacar
un poco a los Cowboys. Una victoria podría poner a los Texans como un
equipo con legítimas aspiraciones de ir a los playoffs por primera vez.
El dueño de los Cowboys Jerry Jones ni siquiera acepta contemplar
arrancar 0-3 y la paciencia no está entre sus virtudes. Otro paso en
falso de un equipo armado para ir al Super Bowl podría provocar cambios
en Dallas
