?Fort Worth, Texas.- Un grupo dirigido por el ex lanzador y presidente de los Rangers de
Texas, Nolan Ryan, ganó el jueves una intensa e inusitada subasta por el
equipo.
Su oferta superó a la hecha por el dueño de los Mavericks de Dallas de
la NBA, Mark Cuban, que ascendía a casi 600 millones de dólares.
El anuncio fue recibido en la sala de la corte del caso con vítores y
una ovación de pie al concluir poco antes de la una de la madrugada la
subasta que se prolongó por 10 horas.
La oferta final del grupo encabezado por Ryan y el abogado Chuck
Greenberg tenía el apoyo de las Grandes Ligas y su última puja de 593
millones de dólares incluyó 385 millones en efectivo. Greenberg es un
abogado de personalidades del deporte.
La audiencia definitiva sobre el plan de bancarrota estaba programada para el transcurso del jueves.
“Fue una montaña rusa de emociones”, dijo Ryan sonriendo, entre abrazos
con colegas en el tribunal. “Un día vas a la corte y las cosas no salen
como quieres, pero regresas otro día y sí. Es un alivio”.
El presidente de la liga, Bob DuPuy, expresó satisfacción con el
resultado. “Estoy muy complacido y espero que Chuck Greenberg y Nolan
Ryan dirijan el equipo por muchos años”, dijo afuera de la sala.
Cuban también sonrió después de la subasta, aunque perdió. Su grupo
decidió no elevar la oferta luego de alcanzar un límite predeterminado.
‘Les deseo lo mejor’, dijo Cuban, quien también buscó adquirir a los
Cachorros de Chicago el año pasado.
La aprobación final de la venta de los Rangers recae en la MLB, que
tiene la opción de elegir la segunda mejor oferta, pero no llegó a eso.
La puja ganadora fue presentada justo después de la medianoche. Aunque
el grupo de Cuban había hecho una oferta de 390 millones de dólares en
efectivo, parte de un total de 598 millones, su propuesta fue
considerada menor debido a que incluía una tarifa de desistimiento de
entre 10 y 13 millones de dólares para el grupo Greenberg-Ryan si éste
perdía.
La subasta, que incluyó tensas discusiones y hasta gritos entre
abogados, fue el último giro en una de las ventas más disputadas de un
equipo del deporte profesional en Estados Unidos.
El anterior equipo subastado de esta manera en las mayores fueron los Orioles de Baltimore en 1993.
De acuerdo con el plan de bancarrota del equipo, los acreedores sólo
recibirán 75 millones del equipo, independientemente de quien resultase
ganador. Pero el juez dijo que los acreedores, a quienes se les deben
525 millones de dólares luego de que el dueño del equipo Tom Hicks cayó
en suspensión de pagos, pueden ir tras otras compañías de Hicks.