Culiacán, Sin.- Pocas veces en su carrera que empezó desde el 2006 Omar Chávez había sostenido combates seguidos en menos dos meses y medio. El hijo de la leyenda peleará el día último de Junio de nuevo en Cancún, en cuya plaza brindó una espléndida actuación que agradó a los aficionados y que motivó al empresario Pepe Gómez a repetirlo casi de inmediato.
Chávez se enfrentará al regiomontano Oziel Santoyo a quien apodan “El Ruso”, un pugilista de 24 años de edad que arrancó su carrera profesional apenas hace cuatro años (31 de julio de 2015), cuando Omar ya registraba un palmaré de 38 combates con solo tres derrotas y un empate.
Tal vez habrá quienes puedan pensar que por su récord de 10-1-1 Santoyo pudiera resultar un adversario a modo para el sinaloense, pero no es así. Oziel tuvo una larga trayectoria en el terreno amateur y decidió debutar a sus 20 años cuando consideró que estaba lo suficientemente listo para emprender tan arriesgada carrera.
Luego de iniciar con un empate y perder por decisión su segunda pelea, Oziel tuvo un despunte interesante ganando sus siguientes diez encuentros que matizó mediante la fórmula del cloroformo al convertir ocho de esas victorias por la vía del nocaut, sobre todo las cuatro últimas.
Omar peleó en aquel paradisiaco balneario el pasado 6 de abril noqueando a Andrés Villamán. Tras esa victoria, el hijo de Julio César Chávez se ha propuesto cumplir algunas metas siendo la más importante la búsqueda de una oportunidad por el título mundial de la división superwelter.
“Quiero darle un giro diferente a mi carrera. Siento que he alcanzado la madurez suficiente como para toparme con adversarios de mucha élite y para eso estoy trabajando muy fuerte, con otra mentalidad”, dijo Chávez quien desde el domingo pasado ya se entrena bajo la tutela del ex olímpico y ex monarca mundial Daniel Zaragoza en la ciudad de México, apoyado por su tío y también entrenador Rodolfo Chávez.
