Ciudad de México.- ¡Todo un mago! el mejor tenista de todos los tiempos Roger Federer regresó a la arcilla de Roland Garros para efectuar su entrenamiento de rutina, luego de que estuvo ausente por cuatro años y busca destronar al español Rafael Nadal.
Federar llegó a la cancha para practicar en compañía del argentino Diego Schwartzman para realizar un peloteo de rutina y ponerse en forma ante del segundo Grand Slam del año.
En un saque que realizó el “Expreso Suizo”, Schwartzman devolvió la pelota donde Federer dejo con la boca abierta tanto a su acompañante como los presentes en la cancha, al realizar un control de pelota de otro mundo, al bajarla pegada a su raqueta.