Ciudad de México.- ¡Y así seguirán! En el partido entre Medias Blancas de Chicago y Astros de Houston, miles de aficionados abuchearon a los jugadores rivales por el escándalo del robo de señales en 2017, pero hubo uno en especial que avivó más la llama en contra de ellos.
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Durante la parte baja de la cuarta entrada, un aficionado en el jardín central, ingresó al terreno de juego un barril inflable, desatando la locura en el estadio.
Un personal del lugar fue a retirar dicho objeto, pero este fue captado por las cámaras, riéndose de la situación.
En todos los estadios de las Grandes Ligas, el conjunto de los Astros de Houston son recibidos de manera hostil.
