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Mazatlán, Sinaloa.- Luis Antonio Ríos González desde adolescente sueña con hacer un vestido para la Reina del Carnaval de Mazatlán, sin embargo, la vida le dio la oportunidad de participar en la máxima fiesta para ser el creador del traje del Rey del Carnaval, junto con su cortejo.
El traje, que será innovador y nunca antes visto en lo que va de la fiesta, está confeccionado de una forma que impactará, asegura “Momo”, quien por segunda ocasión es el encargado de vestir al representante de la celebración, con la firme convicción de que el Rey tiene la misma importancia que una Reina.
“Algo que me llenó plenamente es que cumplimos el objetivo de verlo llorar, llorar de emociones, porque creo que cuando conocen su vestuario real, ahí es donde realmente se despierta y dejan todo lo que cargaron durante su candidatura, ver que todo valió la pena y ese es el resultado final, que me haya dicho sus emociones, para mí me llena de satisfacción porque creo que estamos haciendo buen trabajo”.
Dijo que este es un vestuario que ha costado trabajo, ya que por la pandemia estaban dudosos de si se celebraría el Carnaval, pero que, tras definirse, junto con quienes le ayudan a confeccionar, están dando lo mejor que sí para que el traje lleve el mismo nivel del anterior, aunque éste será más grande en volumen, porque pesa cerca de 28 kilos.
Cristalería, lentejuela, fantasía, cortes, además de telas con textura, es con lo que está conformado el traje, que está inspirado en Cronos, el Dios del tiempo, con una visión diferente, interpretado desde la creación del universo, ya que el traje habla de galaxias, constelaciones, meteoritos y las estrellas, pero también retoma la mitología, que encajarán perfecto con la carroza que ha fabricado Ocean Rodríguez, para el Rey del Carnaval.
A la gente le va a gustar mirar algo distinto, pero también le aplaudirá al Rey, porque será todo un espectáculo dentro del escenario, por la representación que tiene del pasado y el futuro, y en el que Obed Ibarra lucirá por ser un traje que pareciera que desde el primer momento fue hecho a la medida, aun sin saber quién sería el Rey y quien, al verlo, lloró de emoción, con lo que cumplió con el objetivo de despertar el amor por el Carnaval, así como el que él tiene.
