Culiacán, Sin.- El campo sinaloense tuvo un 2023 muy complicado y desde la Asociación de Agricultores del Río Culiacán (AARC) la opinión del año que culmina es que ha sido uno muy complicado, sobre todo por el tema de la comercialización del maíz.
El presidente de la AARC, Enrique Riveros Echavarría, explicó un poco sobre lo que significó para los productores de la capital del estado.
“Un año complicado, un año complejo. Se hizo un esquema diferente al que estábamos acostumbrados, y pues todo lo diferente y todo lo nuevo lleva su curva de aprendizaje y su tiempo para echarlo a andar”.
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El esquema consistió en retirar del mercado 2 millones de toneladas de maíz y a partir de ahí lograr un precio destinado a los grandes compradores. Se acordó en mayo de este año por parte de Segalmex y Gobierno del Estado con un precio de garantía de 6 mil 965 pesos por tonelada.
Sin embargo, en el camino surgieron diferentes problemas que provocaron pagos tardíos y otra serie de dificultades.
Pero ese tema no es exclusivo de la agricultura de los productores del río Culiacán, sino que es generalizada en Sinaloa, sobre todo en el tema de la comercialización del maíz, según explicó Riveros Echavarría.
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“Los productores pues hicimos lo que teníamos que hacer, produjimos, sembramos, tuvimos buenas producciones, sin embargo, el tema de la comercialización pues sí se nos complicó mucho”.
Y para el 2024 el panorama no apunta a mejorar mucho. Si bien el reto del 2023 ha sido el esquema y comercialización, para el año entrante la crisis hídrica apunta hacia un panorama muy complicado con el agro sinaloense, con unas presas por debajo del 32 por ciento y un campo muy golpeado por la falta de lluvias.
